Mes de María 2010
Primera semana: la Alianza de Amor - 3 minutos con María -
4° día - 11.11.2010
¿Qué es lo que ella quiere -y no quiere- desde nuestros Santuarios? Doy una segunda respuesta. Ella no quiere realizar allí milagros físicos, como lo hace en otros lugares de gracia. Ella ve su tarea en dar nuevamente a luz a Cristo, tal como lo hizo al comienzo de la Iglesia. ¿Cómo quiere hacerlo? A través de nosotros. Quiere darlo nuevamente a luz en nosotros, es decir, en los miembros de la Iglesia.
¿Cuál es la tarea de la Santísima Virgen? Ella quiere en la Iglesia de las nuevas playas, en estos tiempos más nuevos, glorificarse a sí misma regalando gracias de transformación en todos los ambientes donde los hombres le entregan su confianza. Ella quiere crear este hombre nuevo, capaz de dominar los tiempos nuevos.
Esto vale de igual manera para el Santuario original, como también para los otros Santuarios filiales. Es una buena decisión, por tanto, acceder a las inquietudes de la Santísima Virgen. En cuanto al Santuario del hogar, no se trata sólo de establecer en nuestra casa un rincón de oración o de Schoenstatt; no deberíamos darnos por satisfechos con ofrecerle a la Santísima Virgen un lugarcito. Debemos dejar que, desde ese santuario del hogar, la Virgen se preocupe de que todo el hogar esté envuelto por el hálito -una atmósfera- religiosa. Esta atmósfera religiosa debe mantener unidos a los cónyuges y penetrar el corazón de los hijos y los nietos.
Pero la tarea más grande que María quiere realizar en el Santuario del hogar es que crezca lentamente en cada uno de sus miembros el Santuario del corazón. Partiendo del Santuario del corazón, se captará e impregnará cada vez más toda la vida.
(De: Plática después de la consagración de una familia, 2 de octubre de 1966)
Reflexión elaborada por los Padres de Schoenstatt de Córdoba para el Mes de María de 2010
Primera semana: la Alianza de Amor - 3 minutos con María -
4° día - 11.11.2010
¿Qué es lo que ella quiere -y no quiere- desde nuestros Santuarios? Doy una segunda respuesta. Ella no quiere realizar allí milagros físicos, como lo hace en otros lugares de gracia. Ella ve su tarea en dar nuevamente a luz a Cristo, tal como lo hizo al comienzo de la Iglesia. ¿Cómo quiere hacerlo? A través de nosotros. Quiere darlo nuevamente a luz en nosotros, es decir, en los miembros de la Iglesia.¿Cuál es la tarea de la Santísima Virgen? Ella quiere en la Iglesia de las nuevas playas, en estos tiempos más nuevos, glorificarse a sí misma regalando gracias de transformación en todos los ambientes donde los hombres le entregan su confianza. Ella quiere crear este hombre nuevo, capaz de dominar los tiempos nuevos.
Esto vale de igual manera para el Santuario original, como también para los otros Santuarios filiales. Es una buena decisión, por tanto, acceder a las inquietudes de la Santísima Virgen. En cuanto al Santuario del hogar, no se trata sólo de establecer en nuestra casa un rincón de oración o de Schoenstatt; no deberíamos darnos por satisfechos con ofrecerle a la Santísima Virgen un lugarcito. Debemos dejar que, desde ese santuario del hogar, la Virgen se preocupe de que todo el hogar esté envuelto por el hálito -una atmósfera- religiosa. Esta atmósfera religiosa debe mantener unidos a los cónyuges y penetrar el corazón de los hijos y los nietos.
Pero la tarea más grande que María quiere realizar en el Santuario del hogar es que crezca lentamente en cada uno de sus miembros el Santuario del corazón. Partiendo del Santuario del corazón, se captará e impregnará cada vez más toda la vida.
(De: Plática después de la consagración de una familia, 2 de octubre de 1966)
Reflexión elaborada por los Padres de Schoenstatt de Córdoba para el Mes de María de 2010
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