Día 23 del Mes de María

30 de noviembre

                              Lavanda. Es una planta muy rústica, que se conforma bien a  diferentes climas  y suelos, aún áridos y pedregosos y que llega a  formar bonitas matas.     Las flores son pequeñas y en forma de espigas en la parte superior de los tallos, cuya función es atraer a los insectos polinizadores.  El nombre "lavanda"  viene del gerundio latino "lavar" (que debe ser lavado), para aludir al hecho que esta especie fue muy utilizada en la antigüedad (sobre todo en el Edad Media), para “lavar” el cuerpo. Los responsables del característico perfume de la lavanda son los aceites esenciales  localizados en todas las partes verdes de la planta (flores, hojas y tallos), pero particularmente concentrados en las flores, que siguen perfumando los ambientes aun después de cortadas, con un “aroma cálido y profundo” que puede ser símbolo del aroma que deja la “aceptación gozosa” cuando la vivimos fuertemente apoyadas en la Fe Práctica en la Divina Providencia.

Querida María:

                        Hoy quiero regalarte este pequeño ramito de lavandas como símbolo de querer vivir cada día en la “Aceptación gozosa”, para que el perfume de la Voluntad de Dios impregne toda mi vida. Amén”.

Oh Señora mía......