lunes, febrero 18, 2013


Carta de Alianza

Febrero 2013
 
Queridos hermanos en la Alianza:

 El 15 de febrero un meteorito impactó en la atmósfera sobre Rusia hasta caer en la región de los Urales. La onda expansiva produjo explosiones e innumerables daños en muchas ciudades rusas. “¡Febrero impactó!” fueron las palabras de un matrimonio que me encontré hace unos días. Pero no fue el único impacto de febrero.

El 2 de febrero nos llegó la noticia del cese en las negociaciones con los Palotinos sobre la compra del Santuario Original. Según nos informaron de la Presidencia Internacional de Schoenstatt, la causa es que, a los puntos del consenso hasta ahora convenidos con los Palotinos, llegó imprevistamente por parte de ellos el pedido de un terreno o edificio en la cercanía inmediata del Santuario. Además resultó que hace poco tiempo ellos alquilaron, por tiempo indeterminado, a otra institución una parte de la casa St. Marien (Casa Antigua frente al Santuario Original) que era parte de lo que íbamos a adquirir. El actual contrato de usufructo del Santuario Original finaliza el 30 de junio del 2013 y, si no surgieran cambios en la situación creada, ese día dejaríamos la administración pastoral del Santuario Original. Realmente una noticia que ha causado enorme asombro y gran dolor en la Familia de Schoenstatt internacional.  

 ¿Qué pasó? ¿Malos entendidos, mala voluntad? Es difícil saberlo y no es bueno prejuzgar; lo que sí sabemos es que el Santuario y la Mater necesitan más que nunca nuestra entrega en este año de la Misión. Les propongo tres caminos para “conquistar” el Santuario Original y que sea definitivamente “nuestro”:

Capital de Gracias: el año pasado pedimos apoyo económico para solventar los gastos del Santuario en estos meses y muchos respondieron con gran generosidad. Hoy el pedido es que rodeemos el Santuario Original con nuestras oraciones y ofrecimientos. El Santuario Original será definitivamente nuestro cuando lo “conquistemos” con nuestro capital de gracias y entregas solidarias de amor. 

Unidad fraterna: si vivimos en Alianza de amor entre nosotros el Santuario Original será nuestro “hogar común”, nuestra “casa familiar” y “lugar de encuentro”. Creo que debemos crecer más en fraternidad y confianza, dejar de lado absurdas ambiciones y juegos de poder, y fomentar más la unidad, el diálogo sincero y el trabajo en común.

Cultura de Alianza: La corriente de Alianza que partió del Santuario Original hace casi 100 años y fecundó nuestros corazones, pueblos y hogares, retorne ahora llena de frutos de santidad al Santuario Original. Siguiendo el ejemplo del P. Kentenich y los primeros misioneros de Schoenstatt sembremos Alianza de Amor, gestemos vínculos y tendamos puentes entre los hombres y de los hombres con Dios. En este año de la fe y la misión, regalemos el mensaje de la Alianza de Amor con la Sma. Virgen y seamos constructores de “cultura de Alianza”.

Finalmente, el último impacto de febrero, como un meteorito, fue la noticia de la renuncia del Santo Padre, Benedicto XVI, como obispo de Roma y por lo tanto al papado,por la edad avanzada” y porque “ya no tengo fuerzas para ejercer adecuadamente el ministerio petrino”. Más allá del entendible asombro y dolor que nos ha producido esta noticia debemos destacar del Papa Benedicto la lucidez de su amor a la Iglesia, la humildad en el reconocimiento de sus limitaciones para conducirla y la sinceridad de conciencia ante Dios al tomar esta trascendente decisión para el bien de la Iglesia y del mundo.  

Como decía en la carta que mandé hace unos días respecto a este tema, Benedicto XVI ha sido un Papa coherente y valiente desde el primer día de su pontificado, especialmente en difíciles momentos de la vida de la Iglesia, siguiendo a Cristo buscó la verdad y la justicia en el amor. Con el mismo amor, coherencia de vida y valentía culmina también su ministerio pontificio. Creo que las palabras del P. Kentenich “Quien tiene una misión ha de cumplirla aunque un salto mortal le siga a otro” ilustran muy bien esta profética decisión del Papa.

Queridos hermanos, en este día de Alianza pidamos a la Sma. Virgen por el Santuario Original, por la Familia de Schoenstatt, por la Iglesia, por el Papa Benedicto y por la elección del futuro Papa, que conducirá la barca de San Pedro mar adentro, hacia las nuevas playas. “¡Pruébenme con hechos que me aman!”.

¡Feliz día de Alianza!

Desde el Santuario les mando un cordial saludo y bendición,

P. José Javier Arteaga

 

¡CON MARÍA ARDAMOS POR LA MISIÓN!

 

No hay comentarios.: