jueves, mayo 25, 2017

Mes de María - Día 25

La profundidad de la Alianza de Amor
“La profundidad de la Alianza de Amor define el grado de nuestra entrega. Mientras mayor es el amor a un “tu” más fuerte es el impulso a pertenecerle y a regalársele.
El amor en el plano natural, tiene diferentes grados de disposición. Otro tanto sucede con nuestro amor a la Madre de Dios. Probablemente todos nosotros hemos querido primero a la Virgen, porque esperábamos mucho de ella. Esperábamos que ella nos dirigiera y protegiera y por eso rezamos una y otra vez, y le regalamos aquí y allá, algún sacrificio.
En este estado de principiantes, estamos todavía y principalmente preocupados de nuestros propios deseos. Si el amor crece, anhelamos pertenecerle más profundamente y nos entregamos a ella enteramente, le entregamos todo cuanto somos y tenemos, le entregamos todo para darle alegría y no nos preguntamos ni inquietamos por el propio bienestar. La Virgen debe disponer sobre nosotros pues ya no nos pertenecemos.
A decir verdad, el amor, cuando es autentico, debe crecer siempre. Quienes aman, en algo deben estar siempre descontentos porque sienten que todavía no aman bastante y todavía quisieran amar mas intima y profundamente. Por lo tanto, así se desarrolla el amor.
Podemos imaginar de manera que la Virgen inscribe nuestros nombres en su corazón.  Si ella inscribe nuestro nombre en su corazón, no nos olvida jamás.
La Madre de Dios nos llama a todos a la entrega. ¿Cómo es nuestro amor a ella? Sabemos que mientras más grande es el amor, tanto mayor es la entrega. Tal vez entregamos a ella ocasionales contribuciones al Capital de Gracias o hemos hecho nuestra alianza en profundidad de un Poder en Blanco o de la Inscriptio, o más aun, del Acto de José Engling. Sea cual sea la profundidad de nuestra alianza de Amor, sabemos que siempre podemos amar mas y queremos tender siempre a ese mas. La Mater no se deja ganar en generosidad. Podemos estar seguros de que ella nos quiere siempre más que nosotros a ella. Ya en el Acta de Fundación nos hace un llamado a ello:”Yo amo a los que me aman.”(María si fuéramos como tu – PJK)


ORACION

Usa de nosotros según tu voluntad;
haz que por Schoenstatt vuelvan a llenarse
las amplias naves de la Santa Iglesia
y que alabanzas circunden tu trono.
Si deseas, puedes dedicarnos al trabajo,
puedes mandarnos cruces, penas, dificultades.
En el éxito o en el fracaso
anunciaremos siempre tu amor.
Padre, hágase en cada instante
lo que para nosotros tienes previsto.
Guíanos según tus sabios planes,
Y se cumplirá nuestro único anhelo. (HP 8-10)

  
Y me consagro a ti, diciendo: Oh Señora mía, Oh Madre mía. . . . .


PROPOSITO

Hacer una visita a Cristo Eucaristía para agradecerle su comprensión, misericordia y amor. 



Irene Bareiro

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