sábado, septiembre 22, 2007

Fechas importantes octubre 2007


01 Santa Teresita del Niño Jesús
02 Santos Ángeles Custodios
04 San Francisco de Asís
07 Nuestra Señora del Rosario
12 Nuestra Señora del Pilar
13 Última aparición de Nuestra Señora de Fátima
15 Santa Teresa de Jesús
18 Alianza de Amor
21 día de la madre en Argentina

27 Acta de Prefundación

domingo, septiembre 16, 2007



Queridos hermanos en la Alianza:

El mes de septiembre nos ha traído nuevamente los días cálidos y luminosos; los árboles se van revistiendo de un suave verde nuevo y la vida se despliega con renovada vitalidad. No es casualidad entonces que en septiembre tengamos tantas fiestas en honor de María: el 8 Nacimiento de la Sma. Virgen; el 12 Santo Nombre de María; el 15 Ntra. Sra. De los Dolores; el 24 Ntra. Sra. de la Merced. Podríamos decir que María y la vida van muy unidas, más aún, que la Plenitud de Vida se manifiesta en María, que María nos trae la Vida misma, a Cristo Jesús.

María es sinónimo de vida, es madre. Ella concibe, da a luz, cuida y educa a su Hijo. Así la vemos con Jesús y José en el pobre pesebre de Belén, en la huída a Egipto, en la peregrinación al Templo de Jerusalén y en la vida cotidiana de Nazaret. María esta atenta a la vida, por eso es solidaria con aquellos novios en Caná que se han quedado sin vino en su fiesta de bodas, y pide a Jesús por ellos. María es la mujer que ama, que es fuerte en la fe y que cree en su Dios estando al pie de la cruz de su único Hijo. María es la madre que une y reúne a los discípulos de Jesús en el Cenáculo y los alienta a permanecer fieles y a anunciar la Vida Nueva resucitada.

Con María hemos sellado una Alianza de Amor, la cual renovamos cada 18 de mes. Con María, la Madre de la Vida. Y mientras les escribo esta Carta de Alianza vienen a mi memoria las tremendas imágenes de los tobas chaqueños, raquíticos, que están muriendo de desnutrición. Recuerdo a los ancianos golpeados y asesinados para robarles unos pesos. Recuerdo los casos de los jóvenes idiotizados y aniquilados por el consumo de drogas y alcohol. Los secuestros, las violaciones, los abortos, la violencia en las canchas de fútbol y en los barrios. La inseguridad, la mentira y la corrupción pública y privada. Esto también sucede en este septiembre; junto a la vida hay mucha muerte. Y María seguramente nos pregunta dolorida, ¿qué hacemos sus hijos y aliados para que triunfe en nuestra Patria la cultura de la Vida sobre la cultura de la muerte?
Hace unos días me llegó un mail donde me contaban que un obispo dijo que “la gente está un poco desilusionada de la dirigencia política”, y consecuentemente un gobernante le respondió que “la Iglesia debe limitarse a velar por la parte espiritual”. Tal vez algunos católicos todavía no saben (entre ellos este gobernante) que nuestra fe se fundamenta en un Dios eterno que se encarnó y vivió entre los hombres para hacernos partícipes de su amor y su salvación; y que la Iglesia, siguiendo las enseñanzas del Señor, anuncia el mensaje de redención, ama, defiende y está atenta a la vida de todos los hombres y de cada hombre en esta tierra. Las veces que se ha olvidado de este principio, ha errado su camino.



Por eso las palabras del Card. Errázuriz en la homilía de Aparecida, que les escribí en el mes de junio, me parecen tan apropiadas nuevamente: “Proclamaremos de manera convincente que toda vida humana es sagrada y requiere para sí un trato digno y enaltecedor. Nos seguiremos oponiendo a la pena de muerte, a la violencia, a la tortura, al aborto, a la eutanasia y a la lacerante miseria, que no se condice con la dignidad de la vida humana, que fue creada a imagen y semejanza de Dios. Nuestra opción es la vida para todos, particularmente para los pobres y abandonados. Nuestro “no” a la anticultura de la muerte nace con fuerza de nuestro “sí” a la vida.”


Dentro de un mes en la Argentina tendremos elecciones para presidente, gobernadores, intendentes y legisladores. Las elecciones son el modo que tenemos los ciudadanos para expresar nuestra voluntad soberana y elegir así a nuestros gobernantes. Somos nosotros los que, haciendo uso de nuestra libertad y responsabilidades cívicas, elegimos a los que creemos más idóneos para conducir la Patria.



En el documento “El compromiso ciudadano y las próximas elecciones” nuestros obispos nos recuerdan cuatro temas a los cuales tenemos que prestar especial atención a la hora de analizar candidatos, sus propuestas y sus plataformas partidarias:
1. La vida es un don de Dios y el primero de los derechos humanos que debemos respetar. Corresponde que cuidemos por su existencia y dignidad desde el momento de la concepción y hasta su fin natural.
2. La familia, fundada en el matrimonio entre varón y mujer, es la célula básica de la sociedad y la primera responsable de la educación de los hijos. Debemos fortalecer sus derechos y promover la educación de los jóvenes en el verdadero sentido del amor y la familia.
3. El bien común, es el bien de todos los hombres y de todo el hombre. Debemos ponerlo por sobre los bienes particulares y sectoriales.
4. La inclusión social, debemos priorizar medidas que garanticen y aceleren la inclusión de todos los ciudadanos. La pobreza y la inequidad, no obstante el crecimiento macroeconómico y los esfuerzos realizados, siguen siendo una injusticia nacional.


Con nuestro voto, pensado y rezado, estaremos ayudando a construir la cultura de la Vida y una Patria con rostro de Familia.

Queridos hermanos en la Alianza, el 15 de septiembre recordamos el fallecimiento del P. José Kentenich. Sea nuestro mejor regalo y homenaje de hijos, vivir comprometidamente nuestra Alianza de Amor “con la mano en el pulso del tiempo y nuestro oído en el corazón de Dios”.

Desde el Santuario les deseo un bendecido día de Alianza.

P. Javier Arteaga

viernes, septiembre 14, 2007

2º Congreso Internacional Federación de Madres

Entre el 25 y el 30 de setiembre del corriente se realizará en Nuevo Schoenstatt, Florencio Varela, el 2º Congreso Internacional de la Federación de Madres.

Participarán los responsables de las Federaciones de Alemania, Brasil, Chile, España, Estados Unidos, Portugal y como anfitriones, Argentina y Paraguay.

Bajo el lema “Caritas Christi, urget nos!” –El amor de Cristo nos urge- nos reuniremos a nivel internacional para intercambiar experiencias e ideas, aunar vínculos y enriquecernos mutuamente con los aportes de cada comunidad.

Nunca el Carisma del Padre ha tenido tanta trascendencia y tanta gravitación en la cultura como ahora, y como Federación queremos proyectarnos hacia un gran futuro, sintiéndonos instrumentos de la Mater en la restauración del mundo en Cristo.

El primer congreso internacional de la Federación de Madres tuvo lugar en septiembre de 2002, en Schoenstatt, Alemania.

Las invito a que hoy comencemos la novena por la canonización de nuestro Padre Fundador para que el Espíritu Santo nos acompañe durante su desarrollo y sea fecundo para toda la Federación.
Al finalizar el Congreso, compartiremos con ustedes las conclusiones. Muchas gracias por acompañarnos con sus oraciones.

M.Inés Erice de Podestá, Jefa Territorial
Mañana, 15 de setiembre, recordaremos un nuevo año de la partida de nuestro Fundador a la casa del Padre. Pidamos por su canonización y seamos portadoras de su carisma. El P.Nicolás nos dice:

La nueva presencia del
Padre Fundador


1. Hacerle presente al Padre Fundador. ¿Qué espera el Fundador de los miembros de su Familia de Schoenstatt? Me parece que él quiere que nosotros lo hagamos presente en el mundo de hoy. Quiere que cada uno de nosotros lo prolongue a él, a su obra y su carisma. Esto tiene que ver con su canonización. La Iglesia, al canonizar a una persona, confirma que vivió una vida santa y que por eso es un modelo para todo cristiano. Pero no sólo canoniza a la persona, sino también lo que la persona hizo, proclama la validez de su obra.

Por eso la Iglesia, al canonizar al Padre Kentenich, debería poder canonizar también a su Familia santa. Es decir este hombre es tan santo que hay miles de personas que se han santificado a causa de él. De allí que nuestro anhelo y esfuerzo por la santidad es un testimonio para su canonización.

Un Obispo alemán dijo en el entierro del Fundador: “Uds. son la carta de presentación del Padre Kentenich”. Que el párroco diga: Estos schoenstattianos son los que mejor trabajan. Que el Obispo diga: Con este movimiento se puede contar siempre. Y que nuestros amigos o compañeros digan: Qué cambiada está esta persona o esta pareja desde que entró a Schoenstatt.

2. Responsables de su obra. Creemos que a través de él, Dios ha querido dar una respuesta a los desafíos de nuestro tiempo. Como Familia de Schoenstatt hemos de asumir esta respuesta en nosotros mismos y entregársela como un servicio a la Iglesia y el mundo. Hemos de ser prolongadores del carisma de nuestro Padre.

2.1 Corazón de la Iglesia. ¿Cuál es el mensaje del P. Kentenich y de nosotros para la Iglesia?
Las palabras “Dilexit Ecclesiam” - Amó a la Iglesia- grabadas en su tumba expresan claramente la gran preocupación de su vida: regalarle a la Iglesia un gran movimiento de renova­ción mundial.


A la vuelta del exilio de Milwaukee, dijo a la Familia reunida: “Creemos que tenemos la vocación de ser corazón de la Iglesia. ¿Qué significa ser corazón? Significa ser el poder de amor, una fuerza que conquiste a la Iglesia, que llene la Iglesia con el heroísmo del amor. Ser poder de amor, esta es nuestra misión”.

Por eso, el Padre siente la necesidad y la responsabilidad por renovar la Iglesia, para que pueda ser alma del mundo. Y Schoenstatt con la tarea de ser María en la Iglesia, de ser corazón de esa Iglesia renovada. Por eso nos dio la misión de poner en práctica la Iglesia del Concilio.

Ahora, ¿qué podemos hacer para cumplir con el encargo del P. Fundador? Si queremos ayudar a forjar esa Iglesia del mañana, Schoenstatt debe ser una anticipación de la Iglesia renovada, de la Iglesia del Concilio. Así como el Padre lo hizo, debemos dedicarnos a construir Schoenstatt, así trabajamos por la Iglesia del futuro.

La otra forma de ayudar a renovar la Iglesia es insertarnos activamente en los organismos pastorales de la Iglesia. En las parroquias y la pastoral con un gran espíritu de servicio. Creo que todos nos damos cuenta de los regalos que recibimos de Schoenstatt y que no son para guardarlos, sino para transmitirlos a otros, para enriquecer a toda la Iglesia. El día de mañana, en toda la Iglesia ha de notarse algo de nuestro carisma schoens­tattiano.

2.2 Alma del mundo. Schoenstatt debe ser corazón de la Iglesia y además debe ser alma del mundo. El Padre nos llama a transformar el mundo. Si queremos hacerle presente al Padre, no podemos quedarnos tranquilos en nuestra casa, vivir allí nuestro cielo. Tenemos que luchar para que nuestra tierra llegue a ser un trozo de cielo, una colonia del cielo.

Preguntas para la reflexión

1. ¿Cambié en algo con Schoenstatt?
2. ¿Cómo trabajo para la iglesia del futuro?
3. ¿Cuál es mi apostolado actual?

Si desea suscribirse, comentar el texto o dar su testimonio, escriba a: pn.reflexiones@gmail.com

sábado, septiembre 01, 2007

Fechas a tener en cuenta setiembre 2007

05 Beata Teresa de Calcuta
08 Natividad de María
12 Dulce nombre de María





14 Exaltación de la Cruz
14 Comenzamos novena por la beatificación del P. Fundador por el próximo Congreso Internacional
15 Nuestra Señora de los Dolores
15 Fallecimiento del Padre Kentenich








24 Nuestra Señora de la Merced
25 Nuestra Señora del Rosario de San Nicolás
25 al 30 Congreso Internacional Federación Madres en Florencio Varela